El obispo de Ciudad Rodrigo, Raúl Berzosa, con motivo de las elecciones municipales y autonómicas escribió una carta en la que señalaba que "no es justo tratar de construir artificialmente una sociedad sin referencias morales o religiosas", y "no se debe confundir la condición de aconfesionalidad o laicidad del Estado con la desvinculación moral".
Berzosa explicaba en aquella ocasión que "al decir esto no pretendo que los gobernantes se sometan a los criterios de la moral católica. Pero sí que se atengan al denominador común de la moral fundada en la recta razón y en la experiencia histórica de cada pueblo", y ejerciten "una sana laicidad positiva donde lo religioso se contemple como un bien para la sociedad".
Pero "no todos los programas son igualmente compatibles con la fe y las exigencias de la vida cristiana".
Berzosa explicaba también que "hemos de valorar las distintas ofertas y programas políticos, teniendo en cuenta valores como la defensa de la vida en todas sus etapas, la promoción de la familia fundada en el auténtico matrimonio, el desarrollo del empleo y la atención a los parados, la calidad de la enseñanza y el cumplimiento efectivo del derecho de los padres a elegir enseñanza religiosa para sus hijos, la atención a los más necesitados, el respeto a los derechos fundamentales de la persona, la contribución a respetar y mejorar el medio ambiente, y el neutralizar cualquier forma de intolerancia, fanatismo o terrorismo".
Suso do Madrid