- Cebrián podrá mantener Santillana, la caja para subsistir.
- Y Moncloa un diario El País y una Cadena Ser cada día más dóciles al Ejecutivo.
- Al final, Alierta cede, pero Telefónica tendrá su Cuádruple Play.
- Eso sí, los derechos de la Liga de fútbol siguen en el aire.
- Y habrá que ver qué dice la CNMC en materia de competencia.
- Santander y Caixa también ganan: no tendrán que aflorar como accionistas de PRISA, lo que no les hacía mucha gracia.
Con nocturnidad, martes 6 de mayo: Telefónica ha llegado a un acuerdo con PRISA: le compra el 56% de Digital Plus por 725 millones de euros. Ahora, Telefónica será la propietaria de Sogecable en un 78% y el 22% restante será para Tele 5.
Lo más importante: con esta operación negociada desde hace un año, Telefónica salva a PRISA de la ruina. Juan Luis Cebrián (en la imagen, junto a César Alierta) aprovechará para quedarse al frente del entramado editorial unos años más. Ya no tendrá que vender Santillana, con cuyos beneficios paga los jornales del Grupo y, además, podrá reducir su deuda (3.000 millones de euros). Telefónica ha salvado a PRISA de la quiebra.
Eso sí, quedan dos interrogantes: los derechos de la liga de fútbol a partir del campeonato 2015-2016, cuya subasta está prevista para septiembre. Y luego, las pegas que puedan interponer, tanto las autoridades antimonopolio de Bruselas, como la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Lo lógico es que se haya negociado antes con este organismo.
Y lo más importante, Moncloa, que estaba por la labor, seguirá manteniendo un diario El País y una Cadena Ser dóciles al ejecutivo. Críticos para mantener sus lectores pero sin pasarse.
A cambio, Telefónica consigue derechos para su Cuádruple Play, la clave del negocio en España. Es decir, canalizar contenidos atractivos a través de la fibra óptica y poder hacer ofertas conjuntas de voz, datos, móvil y TV.
Otros que están contentos son Santander y Caixabank, dos de los principales prestamistas de PRISA. Si no hubiese obtenido esta liquidez, en junio tendrían que aflorar como accionistas de PRISA, tras la conversión de bonos que el grupo editorial no podría pagar.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com