- Ayuda a la Iglesia Necesitada muestra imágenes de la masacre perpetrada por rebeldes sirios a finales de octubre.
- También hubo torturas y estrangulamientos de personas vulnerables incapaces de huir como ancianos, discapacitados, mujeres y niños.
Varias imágenes enviadas a la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) muestran la envergadura de los ataques.
En los respectivos informes, enviados por líderes de la Iglesia, se describe cómo en esta antigua localidad cristiana mencionada en la Biblia (Ezequiel), fueron torturadas y estranguladas personas vulnerables incapaces de huir como ancianos, discapacitados, mujeres y niños. En total han sido asesinadas 45 personas.
AIN recuerda que la tragedia en Sadad comenzó el 21 de octubre, cuando las fuerzas rebeldes del Frente Al Nusra y Daash invadieron la localidad y perpetraron lo que el Arzobispo sirio-ortodoxo Selwanos Boutros Alnemeh, Metropolita sirio-ortodoxo de Homs y Hama, calificó de "la peor y mayor masacre de cristianos" desde que se desencadenara el conflicto en Siria en marzo de 2011.
Al menos 2.500 familias huyeron con lo puesto a la ciudad de Homs, ubicada a 60 kilómetros de distancia, y otras a Damasco, Al-Fhayle, Maskane, Fayrouza, Zzaydal y otros lugares. Algunos recorrieron 8 kilómetros a pie para encontrar refugio. Unas 1.500 familias que no pudieron escapar fueron rodeadas por los rebeldes, y utilizadas para repeler el contraataque de las fuerzas leales al presidente sirio, Bachar el Asad. En los días subsiguientes, al menos 30 habitantes fueron heridos y 10 todavía están desaparecidos.
En una entrevista concedida a Ayuda a la Iglesia Necesitada, el Patriarca greco-católico melquita Gregorio III de Damasco, calificó las atrocidades cometidas en Sadad de "bestiales". Haciendo hincapié en el asesinato de la familia arrojada al pozo, el Patrarica Gregorio III dijo: "¿Cómo puede alguien ser tan inhumano con una pareja anciana y su familia No entiendo por qué el mundo no eleva su voz ante tales actos de brutalidad".
Reiterando su llamamiento a un fin del envío de armas a Siria y, en especial, a los grupos rebeldes extremistas, el Patriarca Gregorio III dijo que estas atrocidades ya estaban desencadenado una nueva ola de emigración de cristianos de Siria. Según señaló, hasta ahora los creyentes habían considerado que Sadad era un lugar seguro en comparación con lugares como Homs, donde las comunidades cristianas ya habían sido atacadas con anterioridad.
El Patriarca dijo que estos hechos eran "un signo del auge del fundamentalismo y del extremismo" en el país, y añadió: "Lo que ha ocurrido en Sadad es muy significativo, pues está impulsando a los cristianos a abandonar el país. Un párroco de Sadad y el Obispo de la localidad me han contado que mucha gente está abandonando Siria".
Como siempre decimos, urgen oraciones por los cristianos perseguidos por su fe en Cristo.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com