El representante de la soberanía popular israelí, Michael Ben-Ari, quiso ser fotografiado en la sede del Knesset, el Parlamento israelí, rompiendo, con la rabia que expresa la imagen, los Evangelios, para después tirarlos a la basura. Informa Religión en Libertad.
21-A. Elecciones en Vascongadas, una sociedad cobarde. ¿De qué valieron los muertos? Ganó el PNV, por la mínima... ¡y a Bildu!
22/04/24 05:47