Sr. Director:

Hasta que los católicos no nos empeñemos de verdad en respetar y exigir respeto -entre nosotros, se entiende- para el Santísimo Sacramento -que es nuestro Dios-, no tendremos legitimación moral para exigir que los demás nos respeten a nosotros.  

J. A. Fdez.

jalbertofl@terra.es