La Fiscalía solicita 18 meses de cárcel para un alto cargo de la Generalitat y 60.000 euros de indemnización, por maltratar a una funcionaria
Gran expectación la que reprodujo el pasado lunes en un Juzgado leridano, donde se celebraba el primer juicio habido en España por ‘mobbing' y donde el acusado era un alto cargo de La Generalitat catalana y el propio organismo. Al menos, el Gobierno de José Montilla ha hecho tan suyo el asunto que ha decidido proteger a Teresa Casals, la acusada, pagándole a sus abogados.
Los hechos se han venido desarrollando desde hace un lustro. La damnificada es Begoña Solé, administrativa adscrita a la delegación de Lérida del Servicio de Carreteras, a la que la actitud de Casals le envió a la consulta del psiquiatra.
Al final del juicio oral, la Fiscalía no sólo mantuvo la petición de 18 meses de cárcel para Casals, sino que elevó de 4.000 a 60.000 euros la indemnización solicitada.
Por su parte, el Gobierno Montilla y el conseller de Política Territorial y Obras Públicas, el también socialista Joaquin Nadal, han volcado todos sus efectivos en evitar una sentencia contraria, que sentará precedente. Sin embargo, tanto los médicos que le han tratado a Begoña Solé, como la Inspección de Trabajo han insistido en que hubo persecución y trato vejatorio por parte de su superiora. Ahora, hay que esperar a la sentencia.