José Bono desde la política y Emilio Botín desde la banca sostienen a la primera inmobiliaria española por facturación

Banesto vendió la inmobiliaria Urbis del Grupo Reyal, propiedad de Rafael Santamaría y con la compra Reyal se convirtió en la primera inmobiliaria de España por facturación en 2007, superando a Martinsa Fadesa.

Pero, como era costumbre en los felices 2000 y poco, el grupo Santander vendió Urbis muy caro y financió la venta al comprador, con lo que el apalancamiento de Reyal creció más allá de lo que aconseja la prudencia.

Ahora bien, Santamaria no es Fernando Martín. Santamaría es el hombre que invita la familia de José Bono, hoy presidente del Congreso y líder socialista en la reserva, a pasar el fin de año en Baqueira Beret, como corresponde a su tronío. Por otra parte, si Reyal entra en suspensión de pagos, el primer damnificado podría ser Banesto, es decir, don Emilio Botín.

Así que Reyal ha recibido trato de favor del ICO, e incluso el propio Banesto ha accedido a hacerse con promociones de Reyal, eso sí, para su cartera -unos 240 millones de euros-, lo que, si el Banco de España lo permite, representa menos provisiones que un crédito fallido.

Por cierto, hay más gente interesada en el loable propósito de salvar a Reyal. Un detalle: el único vocal de Urbis que se mantiene en el actual consejo es Don Carlos de Borbón, primo de su majestad el Rey.