Sr. Director:

Según datos del INE, sólo 645.000 españoles han mantenido relaciones homosexuales "alguna vez". Una pequeña parte de ellos son homosexuales, es decir, un porcentaje muy inferior al 1%. Este dato contrasta con el protagonismo del colectivo gay en las series televisivas. Todas van incorporando algún personaje homosexual, so pena de parecer anticuadas. Esto demuestra la fuerza que tiene el lobby rosa, la poca personalidad que tienen muchos guionistas y el nulo interés que tienen muchos medios en reflejar la realidad social.

Otra estadística esta vez del CIS- nos dice que el 79,7% de los españoles se define católico; el 35,4% se considera bastante religioso; y el 19,28% va a misa los domingos. ¿Qué reflejo tiene en las series? Nunca aparece un creyente que no sea un tío raro. Los personajes atractivos nunca son cristianos comprometidos ni aparecen yendo a misa un domingo, circunstancia que, según la estadística, debería ser habitual. Frecuentemente, se hacen bromas o comentarios agresivos acerca de la Iglesia Católica, sin importar que sea un ataque a las creencias de la mayoría.

La historia de España en los últimos siglos registra una pugna entre clericalismo y laicismo, del cual se deriva un acusado complejo anticatólico. Pero, en pleno siglo XXI, después de veinticinco años de democracia madura (¿?), ya va siendo hora de sacudirse ese complejo.

Juan Gaisse Fariña