• Se hacen con sus negocios y luego con su control.
  • Con Bankia y Catalunya Banc se hicieron con la gestión inmobiliaria a cambio de pagar las nóminas de los empleados de esa división.
  • En el caso de Evo Banco se han hecho, además, con el control de toda la entidad.
  • Y al fondo, la famosa polémica sobre si un fondo debe ser el propietario de una entidad de depósitos.
  • España está barata. No hay más que echar un vistazo rápido a las empresas del IBEX. La banca no es una excepción y los fondos lo están aprovechando.
  • Un par de ejemplos, las operaciones protagonizadas por Bankia y Catalunya Caixa (CX) en las últimas semanas.

En el primer caso, el fondo Apollo adquirió la plataforma operativa Finanmadrid, dedicada a la generación de créditos al consumo al través de comercios y concesiones de automóviles, por 1,6 millones de euros. El acuerdo firmado en marzo entre la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri y el fondo incluía el mantenimiento de los 124 trabajadores de Finanmadrid.

No ha sido el único movimiento. El pasado día 3 de septiembre, otro fondo, en este caso Cerberus, se hizo con la gestión, durante diez años, del negocio inmobiliario de Bankia Hábitat por unos 90 millones de euros. A cambio, los 457 empleados de la división pasaron a formar parte de la nueva entidad.

Otro caso: el acuerdo al que llegó Catalunya Caixa (CX) con dos fondos –el norteamericano Kennedy Wilson y el sueco Värde Partners- para vender Catalunya Caixa Inmobiliaria (CXI), su plataforma de administración y gestión de activos inmobiliarios, a principios del mes de agosto.

Pero este lunes, los fondos han dado un paso más. Concretamente, el fondo Apollo ha llegado a un acuerdo para comprar Evo Banco -filial de NCG Banco- por 60 millones de euros. La operación no es baladí, ya que es la primera de esta naturaleza.

Estamos hablando de la famosa polémica sobre si un fondo debe ser el propietario de una entidad de depósitos o no. El subgobernador del Banco de España, Fernando Restoy, no se cansa de repetir que no, mientra que el ministro de Economía, Luis de Guindos, en las últimas semanas se ha mostrado abierto a esta posibilidad. A fin de cuentas, el dinero de los fondos es tan válido como el de cualquier otro.

Una condición: el fondo que quiera controlar una entidad de depósitos debe garantizar una permanencia mínima para no crear incertidumbre. Por eso, en la nota de prensa remitida por Evo Banco, Apollo afirma que "tiene la intención de asegurar la estabilidad accionarial de la entidad". Además, el acuerdo "permite a Evo Banco mantener el empleo y su red de oficinas", explica la nota.

Sin duda, un precedente muy interesante, que también debería tener en cuenta el presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín (en la imagen).

Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com