• La parte mala, los laboratorios españoles serán los peor parados por la rebaja de las deducciones por inversiones en innovación.
  • El impacto sobre la teleco podría rebajar su beneficio neto un 8% este año.
  • El Gobierno espera recaudar 3.300 millones euros gracias a la supresión de desgravación por depreciación de activos.

PRISA y Jazztel están que braman contra el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. De hecho, las terminales mediáticas del grupo presidido por Juan Luis Cebrián cargaron duramente contra la decisión anunciada el pasado viernes tras el Consejo de Ministros y que afectan a los créditos fiscales: se prorroga dos años más, hasta el 2015, la limitación de las bases negativas para los créditos fiscales que está en el 25%, frente al 50% anterior.

Aún así, hay razones para sospechar que la más perjudicada no será PRISA sino Jazztel. La teleco presidida por Leopoldo Fernández Pujals (en la imagen) podría ver rebajado su beneficio neto hasta un 8% este año y un 11% el de 2014 y 2015.

Luego está la limitación de la deducibilidad de los gastos financieros y el aumento de la limitación en las deducciones de I D, que también se prorroga dos años, y que afecta, sobre todo a las grandes empresas que, gracias a su ingeniería fiscal, llega a pagar, como mucho, un 15% de impuestos frente al 30% que paga la pyme.

De todas maneras, la parte mala se la llevan los laboratorios españoles, concretamente Zeltia y Almirall. Es el precio que hay que pagar por hacer I D en nuestro país y, además, no utilizar filiales radicadas en el extranjero.

En total, con las medidas aprobadas por el Gobierno el pasado viernes, Montoro espera recaudar hasta 3.300 millones de euros.

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com