De los valores eternos del Franquismo hemos pasado a los valores universales del Zapatismo, de lo que se deduce que a Franco le preocupa el tiempo y a ZP el espacio. Así ha denominado doña Mercedes Cabrera Calvo-Sotelo, ministra de Educación del Zapatero y, lo que resulta mucho más crematístico, esposa de ‘Littelsands', es decir, del vicepresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Carlos Arenillas, la asignatura Educación para la Ciudadanía, que hoy se estrena en todos los coles españoles controlados por el PSOE. Entrar en el contenido es muy aburrido, más que nada porque doña Mercedes es progresista, esto es, es una mentirosa compulsiva, por lo que habla de una asignatura que enseña valores ciudadanos propios de la Constitución, a pesar de que no haga alusión alguna al español como lengua obligatoria en toda España, y sí predique que la homosexualidad es una digna opción sexual más, algo, que, fíjense ustedes por donde, no figura en la Constitución.

Pero no voy al huevo, sino al fuero. Doña Mercedes Cabrera, ha amenazado al los centros concertados, la inmensa mayoría de los colegios privados, con retirarle el concierto -lo que supone obligarles a cerrar-. Ya se sabe que el progresismo primero exige, mediante la mentira, y luego, cuando alcanza el poder, impone, a través de la asfixia económica.

De cualquier forma, queda de manifiesto que el sistema de conciertos termina con la libertad de educación del centro. Quien paga manda, y en el sistema de concierto paga al Estado y paga a los patrones o de la educación, sean laicos o curas. Es la prueba del nueve. Ha llegado la hora de identificar la libertad educativa con el cheque escolar. Sólo si el dinero público para educación va a los padres y éstos pueden elegir el centro que les venga en gana, se habrá garantizado el derecho. De lo contrario…EpC, por las buenas o por las malas.

Eulogio López

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