Sr. Director:

Para el presidente Chávez todos los que de una manera u otra manera nos oponemos a su modelo de Gobierno, socialista marxista que impulsa, nos cataloga de terroristas.

Pero a los asesinos, los secuestradores, los criminales de las FARC, se niega a catalogarlos de terroristas. Les da un trato de lo más respetuoso y considerado, de jefes de Estado. Trato que a sus adversarios venezolanos no les brinda.

Chávez se conmueve, y se compadece por los secuestrados colombianos, pero se mantiene indiferente por los venezolanos secuestrados por la guerrilla, socialista marxista, de Colombia; y los delincuentes internos.

Chávez se preocupa y ocupa por la falta de viviendas que padece la élite comunista cubana, pero no hace nada para resolver la falta de viviendas que padecen millones de venezolanos.

Chávez se preocupa y ocupa por las carencias hospitalarias, de Bolivia y de Nicaragua mientras los hospitales de Venezuela dan lastima, los pacientes son atendidos en el suelo, carecen de medicina y de los más sencillos equipos médicos.  

Para Chávez lo único importante es su revolución, el socialismo marxista, y su implantación en Venezuela y el mundo. Pero hay millones de venezolanos dispuestos a jugarnos la vida para impedirlo. Apoyados en nuestra fe cristiana y democrática.

El viejo libro deja claro que Dios nos hizo, humanos, seres espirituales, con la gracia del libre albedrío. Y no vamos a renunciar a ello sin pelear. En el nuevo libro Jesús nos enseña a buscar la paz. Pero también con su ejemplo valida la furia, cuando lanza fuera del templo a los mercaderes, que hacían mal uso de ese lugar sagrado.

Nuestra fe: en el nuevo libro, nos invita poner la otra mejilla, que son dos. No el otro dedo. Pero el viejo libro, también, esta lleno de ejemplo de lucha, de su pueblo, por la libertad.

El ‘no' triunfa este 2 de diciembre, pero la lucha continuará, por hacer de Venezuela un país del primer mundo, una nación desarrollada. Apostando siempre a la paz. Pero dispuestos a la lucha en el terreno que las condiciones impongan. Dando, siempre, con los hechos testimonio de los valores con los cuales estamos comprometidos. Aceptando los límites que nuestra fe nos impone. Pero usando con firmeza y determinación los recursos de los cuales disponemos.

Nada fácil, se entiende. Pero no somos revolucionarios, no somos de los que actúan como si el fin justificara los medios. Asumimos como decía Albert Camus que los modos son los que validan lo que somos, los que nos definen, los que dan testimonio de lo que somos: de nuestra fe. Y como manda los Libros Sagrados: predicar con la palabra y los hechos.

Los políticos como gerentes de empresas que no son de ellos, son un desastre, ya están dando muestra de su inmensa incapacidad en CANTV, la telefonía fija, habla ya, esta por el suelo. Teniendo saldo, de más: intentas llamar y te dicen -su saldo no es suficiente-, llamas a CANTV y te dicen que siga intentando. Vamos camino a los tiempos de la cuarta cuando la CANTV estuvo, también, en manos de los políticos y ya sabemos que pasó.

Ojalá pronto vendan de nuevo CANTV al sector privado y usen el dinero de la venta, en mejorar la seguridad ciudadana, los hospitales, las vías publicas y todas aquellas actividades propias del estado.

El mayor Aranguren es otro que cree que el poder es eterno, que puede usar y abusar de su poder. Como les dé la gana, apoyado por Tarek.

Mantiene a los Duarte, una familia querida por todos en Puerto La Cruz, en un Estado de verdadera agonía. Refiere la Sra. Isober de Duarte como su hijo, físico culturista, tuvo problemas con Aranguren por la amistad que mantenía con la esposa de este. En lugar de  hablar con su Sra. esposa, Aranguren arremetió contra él. Y hoy este se encuentra detenido en Puente Ayala, según denunciaron los esposos Duarte.

Lo lamentable es que la justicia venezolana no merece la confianza de la mayoría de los venezolanos.

Esa es otra razón para avanzar hacia una justicia de primer mundo: confiable y donde los funcionarios públicos están sometidos al control de los ciudadanos y existen ejemplares castigos para los abusos del poder.

Los Duartes tienen amigos que no creen en amenazas, y vamos a estar pendiente de los pasos de esta justicia y de lo que pueda pasarle a su hijo, Alí, o alguno de ellos.

Raúl Zapata

raulzapataa@hotmail.com