GM reconoce que la fábrica zaragozana es la más rentable de Europa Los trabajadores de Figueruelas andan revolucionados. Consideran que la marcha atrás de General Motors vuelve a introducir incertidumbre en la plantilla y recuerdan que fue la gestión de GM la que llevó a la situación actual. Sin embargo, conviene recordar que el plan inicial de GM era trasladar actividad de Alemania a España y que el vicepresidente financiero, Enrico Digirolamo, ya ha señalado que la factoría de Figueruelas será clave en la estrategia futura.
Así que aunque General Motors ha anunciado un plan de despidos de 10.000 personas, la nueva situación es una ventana de oportunidad para los trabajadores españoles. Sebastián e Iglesias señalan que el acuerdo de Magna es un punto de partida a partir del cual iniciar la negociación. Pero lo que tienen que hacer gobiernos y comité de empresa es poner en valor la realidad de que Figueruelas es la factoría más rentable de Europa. Que el centro de decisión se encuentre en Detroit es una ventana de oportunidad.
Que Zapatero mantenga una buena relación con Obama es otra ventana de oportunidad. Porque aunque la administración americana asegura que no tiene nada que ver con la sorresiva decisión de GM, la realidad es que la Casa Blanca nunca vio con buenos ojos que la niña bonita' de la industria americana pasara a manos rusas. Una transferencia de tecnología que nunca ha terminado de convencer. Ahora existe una oportunidad. Y la plantilla debería de plantearse antes las oportunidades que las incertidumbres. Porque existen posibilidades ciertas de que los despidos sean menos que los 900 pactados con Magna.
Quien tiene razón para subirse por las paredes es Alemania, entre otras cosas porque ya han puesto 1.500 millones de euros para reflotar la compañía. Obviamente, exigen su devolución inmediata. El Gobierno Merkel se siente estafado. Y los sindicatos anuncian movilizaciones. Es lo suyo. Lo que pasa es que las fábricas alemanas iban a ser mantenidas por respiración artificial mientras que las españolas se mantenían por derecho propio. Y no es lo mismo.
Así que aunque General Motors ha anunciado un plan de despidos de 10.000 personas, la nueva situación es una ventana de oportunidad para los trabajadores españoles. Sebastián e Iglesias señalan que el acuerdo de Magna es un punto de partida a partir del cual iniciar la negociación. Pero lo que tienen que hacer gobiernos y comité de empresa es poner en valor la realidad de que Figueruelas es la factoría más rentable de Europa. Que el centro de decisión se encuentre en Detroit es una ventana de oportunidad.
Que Zapatero mantenga una buena relación con Obama es otra ventana de oportunidad. Porque aunque la administración americana asegura que no tiene nada que ver con la sorresiva decisión de GM, la realidad es que la Casa Blanca nunca vio con buenos ojos que la niña bonita' de la industria americana pasara a manos rusas. Una transferencia de tecnología que nunca ha terminado de convencer. Ahora existe una oportunidad. Y la plantilla debería de plantearse antes las oportunidades que las incertidumbres. Porque existen posibilidades ciertas de que los despidos sean menos que los 900 pactados con Magna.
Quien tiene razón para subirse por las paredes es Alemania, entre otras cosas porque ya han puesto 1.500 millones de euros para reflotar la compañía. Obviamente, exigen su devolución inmediata. El Gobierno Merkel se siente estafado. Y los sindicatos anuncian movilizaciones. Es lo suyo. Lo que pasa es que las fábricas alemanas iban a ser mantenidas por respiración artificial mientras que las españolas se mantenían por derecho propio. Y no es lo mismo.