Los demócratas cubanos se han visto privados del respaldo del Gobierno español

Este miércoles se presentaba de manera simultánea en Habana-Miami-Madrid el balance de los derechos humanos en Cuba. En la presentación madrileña estaban presentes los ex presos Héctor Palacios y Raúl Rivero. La principal conclusión: la situación no ha cambiado. "Sigue igual de mal", señala el presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, Elisardo Sánchez, quien calcula en 234 los presos políticos existentes en la isla-cárcel, 12 menos que en el semestre anterior lo que representa una evolución poco significativa.

De hecho, la mayoría de los excarcelados durante el segundo semestre de 2007 cumplió íntegramente sus condenas. Traducción: las expectativas levantadas por algunos de que la asunción de poder por parte de Raúl Castro iba a mejorar la situación, desgraciadamente no se han cumplido. El balance se caracteriza por el inmovilismo. "Nos gustaría decir que la situación ha mejorado, pero no podemos confundir el deseo con la realidad", señaló este miércoles el presidente del Movimiento Cristiano de Liberación, Oswaldo Payá.

Por ejemplo, durante el 2007 se ha tenido conocimiento de 325 detenciones por motivos políticos. La mayoría de los detenidos fueron finalmente liberados, pero otros continúan arrestados e internados sin cargos formales. "El Gobierno de Cuba persiste en silenciar las voces disidentes y emplea toda clase de acciones intimidatorios contra los ciudadanos que muestra oposición", señala la Asociación Española Cuba en Transición, quien añade que a esa situación, se suma la soledad de los demócratas cubanos que se sienten abandonados por parte del gobierno español. Por eso la AECT solicita un cambio en la política española en relación a Cuba que permita a los españoles "estar con las víctimas y no con los verdugos".