Literario nombre el de Criteria, pero resulta que es el grupo industrial de La Caixa, el más importante de España, que se ha presentado en Barcelona, en la mañana del martes. Y que se supone que saldrá a bolsa en octubre: muy pronto parece. Vale nada menos que 25.250 millones de euros, y posee, entre otras participaciones, Caifor, el primer grupo de seguros de vida de España, el 35% de Gas Natural, el 23,5% de Agbar, el 25% de Abertis, el 14,5% de Repsol YPF y el 5,4% de Telefónica… entre otros.
Al sacar a bolsa su histórico grupo, La Caixa le devuelve la pelota al Banco de España, donde el gobernador con carnet del PSOE, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, que tiene más de capitalista que de socialista, está empeñado en que las cajas de ahorro se conviertan en bancos y posean "control de mercado". La Caixa le ha devuelto la pelota y ha contraatacado: no se convierte en banco ni emite cuotas, pero agrupa sus participadas en Criteria Corporación, que cotizará en bolsa, y de la que La Caixa poseerá un 51% del capital.
Ojo, será un grupo industrial pero invertirá, sobre todo, en el sector financiero. No abandonará las infraestructuras, que han sido como el segundo objetivo social de la entidad desde su fundación. Ahora bien, el problema es que en un mundo que quiere acabar con todo aquello que no sea Sociedad Anónima, crecer como caja es complicado. Total, que Criteria será el instrumento para abrir o comprar bancos en el extranjero, principalmente en Europa del Este y del Sur. No es lo que quería MAFO, peor…
Ojo, que La Caixa está dispuesta a entrar en capital-riesgo, otra concesión al liberalísimo MAFO, al que no le gusta que las empresas españolas dependan de las cajas… por lo que están siendo colonizadas por multinacionales extranjeras, muchas veces de propiedad estatal.
El presidente de Criteria, Ricardo Fornesa, fue el maestro de ceremonias, pero también intervino Juan María Nin, el director general de La Caixa. Como el estilo es el hombre, Nin comenzó su alocución en catalán, español e inglés, por ese orden, y aún dejó más claro que el objetivo primero es financiero, no industrial.
Total, que La Caixa va a poner en el mercado un grupo de 25.252 millones de euros, 21.500 de los cuales responden a empresas cotizadas. Con ello, se demuestra que el capitalismo impera y que quien no acepte ser SA -mutuas, cooperativas, fundaciones, empresa familiar, entes públicos o cajas de ahorros- lo va a tener muy crudo. ¿Por qué? Porque es difícil luchar contra lo políticamente correcto.
