El Grupo PRISA tiene tal apuesta por Hispanoamérica que tiene en su organigrama una división específica. No se trata de 'exportar' los productos españoles, sino de extender la cultura socialdemócrata en el Continente de la Esperanza. Dinero e ideología van de la mano. Y si la relación política acompaña, tanto mejor. Para eso están los amigos.
Es sabido que Kirchner y Zapatero tienen la misma agenda política de recuperación de la memoria. Revanchismo, lo llaman también. Por supuesto, su agenda progre rebautizada como de extensión de derechos también son dos gotas de agua. Así que, dado el buen rollo, qué menos que darle a don Jesús siete licencias de radio en las mejores ciudades del país. Eso es lo que ha hecho Kirchner mediante decretos presidenciales en los últimos días.
Formalmente se trata de concursos convocados en 2001 durante el mandato de Fernando de la Rúa. Las nuevas adjudicaciones consolidan la presencia de don Jesús en el país, porque Prisa ya gozaba de una licencia de FM y otra de AM en Buenos Aires y otra en la ciudad de Mar del Plata.