• El partido Fidesz, de Orban, continuará gobernando en Hungría tras vencer en las elecciones legislativas celebradas ayer con el 44,5% de los votos.
  • El reelegido presidente húngaro ha llevado a cabo una legislación capaz de hacer frente a la comunitaria en temas de vida y de familia.
El conservador partido Fidesz-Unión Cívica, partido del presidente Víktor Orban (en la imagen) seguirá gobernando en Hungría tras vencer en las elecciones legislativas celebradas ayer con el 44,5% de los votos, frente al 26% logrado por la coalición opositora de izquierdas Unión y el 20,7% de la extrema derecha de Jobbik, según los resultados oficiales difundidos con el 97% de los votos escrutados. Los ecologistas del LMP han obtenido el 5,2 por ciento de los votos, con lo que justo entrarían en el Parlamento de Budapest al superar el umbral mínimo del 5 por ciento.

Estos resultados se traducen, según los más recientes cálculos, en 133 escaños para el Fidesz, 38 para la izquierda, 23 para el Jobbik y 5 para el LMP. Con esos 133 ó 134 escaños, el Fidesz retiene su mayoría cualificada de dos tercios entre los 199 escaños de la Cámara, con lo que puede seguir adoptando leyes de rango constitucional sin tener que negociar con la oposición.

Viktor Orban declaró ayer, en el colegio electoral al que fue a votar, que "los húngaros están deseando ver un renacer de esta nación, que se atienda a los que verdaderamente necesitan ayuda en este país y un alineamiento con amigos más aconsejables".

Como recordaba Infocatólica, Orban participó en las últimas Jornadas Católicos y Vida Pública de la ACdP (Asociación Católica de Propagandistas) celebradas el año pasado en Bilbao, donde aseguró que los países mejoran cuando la legislación tiene en cuenta y hace explícitas las raíces cristianas de las naciones en las que son elegidos: «La política tiene que basarse en valores cristianos».

En este sentido, afirmó que «Europa se ha olvidado de Dios y se avergüenza de sus raíces cristianas y, con visión secular agresiva, supranacional y relativista propugna una sociedad sin Dios. Los tecnócratas de la Unión se han olvidado de la familia, patria y justicia, que son los auténticos valores».

El presidente húngaro ha llevado a cabo, además, una legislación que hace frente a la legislación comunitaria en temas de vida y de familia. Orban logró que la constitución húngara defienda la vida desde el primer momento y una familia basada en el matrimonio entre un hombre y una mujer

Y por eso, es atacado en Europa como un ultra...

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com