El hipernacionalista y populista Ollanta Humala perdió el poder. Pero no la ambición. Todavía mantiene sus expectativas de presentarse a las próximas elecciones. Si las cosas siguen como hasta ahora, mantendría posibilidades de ganar. Y puede que sigan, porque como asegura el secretario general de la Secretaria General Iberoamericana, Enrique Iglesias, los altos precios de las materias primas se van a quedar un rato todavía con nosotros. Petróleo caro es garantía de capacidad financiera de Chávez para exportar su revolución bolivariana.
Pero claro, los males nunca vienen solos. Y al nacionalismo expansionista de Chávez se suma el de Humala. Este lunes se ha dado a conocer los planes geopolíticos del líder indígena. En el primer mapa geopolítico militar para el Perú de 2015, se pretende anexionar territorio brasileño y chileno por Arica, Iquique Antofagasta y Valparaíso. No está mal, aunque está mucho mejor lo previsto para el 2020 en el que Perú pasa a llamarse Tahuantinsuyo y su territorio abarcaría la amazonia brasileña, Ecuador, Colombia, Bolivia, Argentina y Chile. Casualmente, Venezuela queda fuera de los planes expansionistas de Humala. Un proyecto que queda pospuesto al 2.011. Atentos porque la estabilidad en la región está más en duda que nunca.