Es lógico que se resista a abandonar la Presidencia: es la empresa pública que mejor paga

En el mundo de la gran empresa todos los problemas pasan por los sueldos de los ejecutivos. Bueno, la mitad de ello: la otra mitad se debe a los bonus de los ejecutivos. La presidenta de Hispasat, Petra Mateos se resiste como gato panza arriba a ceder la Presidencia de Hispasat. Para ello, se opone a que el operador de satélites caiga en manos de la catalana Abertis, a quien todos los socios privados de Hispasat están deseando vender. Mateos opta por la salida a bolsa. Y eso, a pesar de que el consejero delegado de Abertis, SalvadorAlemany, advirtió (ver Hispanidad del miércoles 13) que su filosofía consiste en respetar los equipos directivos de las empresa que compran.

Pues bien, hay una buena razón como para que Mateos se resista: en el presidente de empresa pública que más cobra, precisamente porque su control público es total (el Estado tiene que dar el vito bueno a cualquier transacción entre accionistas, debido al Hispasat Militar) pero la mayoría de su capital es privado. Para ser exactos, doña Petra sale por 420.000 euros al año, unos 70 millones de las antiguas pesetas.