El fallecido José Luis Sampedro aseguraba que el mercado no es libertad. E Ironizaba. Vayan ustedes al mercado sin dinero y verán lo que les dice. Lo cuenta Federico Sáenz de Santamaría, quien trabajó con él.
Y tenía razón Sampedro. En efecto, el mercado no da libertad. Eso es lo que dicen los capitalistas. Los liberales -liberales en economía, que no en filosofía- no creemos en el mercado sino en la propiedad privada. Que es bien distinta -los capitalistas defienden los mercados y la empresa pública. Los liberales defendemos la propiedad privada-. ¿Es lo mismo No, no lo es. De hecho, los distributistas, por la vía de Chesterton ya explicaron la diferencia: un carterista puede ser un gran defensor de la empresa privada, pero no lo será de la propiedad privada.
Porque lo que está en juego ahora es eso: la propiedad privada, una de las raíces imprescindibles de las libertades públicas. Es decir, que el gobierno andaluz se está cargando la propiedad privada al amenazar con sancionar o expropiar pisos vacíos.
Pero lo sorprendente no es eso. Lo sorprendente es la acogida que, en determinados sectores, especialmente judiciales, ha tenido la medida soviética del presidente José Antonio Griñán (en la imagen). Por ejemplo, en la ínclita Gabriela Bravo, portavoz del Consejo General del Poder judicial (CGPJ), muy progresista ella. Resulta que a doña Gabriela, esa mujer que prudencia con lentitud, modera con inacción y justicia con igualdad, apoya con entusiasmo la medida andaluza. Medida claramente injusta porque atenta contra la propiedad privada y contra las leyes que defienden dicha propiedad.
¿Que hay muchas viviendas vacías Pues peor para sus propietarios. Hay que ser idiota para perder el dinero de esa forma. Su indolencia lleva adscrita la penitencia. Y si es un banco lo mismo. Además, cuando se den cuenta de que tiene un activo muy pasivo en la obtención del beneficio, venderán el piso a menos precio, que esa es la solución a la burbuja inmobiliaria española. Y, naturalmente, Rasputín Rubalcaba, apoya a Griñán y a sus socios comunistas pero es que Rubalcaba necesita a Griñán para mantenerse al frente del PSOE. No, lo preocupante no es lo de Rubalcaba sino lo de la señora Bravo.
Que Andalucía está dominada por los soviéticos de Izquierda Unida tiene su peligro, pero mucho más peligroso es que la judicatura esté controlada por progresistas estilo Gabriela Bravo. Es el Gobierno de los jueces al que más temo. Bravo, como todos los jueces y fiscales progres, esos que visten de Armani, ha olvidado que la tarea de un juez no es promulgar leyes, ni tan siquiera alabarlas o denigrarlas, sino aplicarlas. Y con ello ya van sobrados de poder. Así que aplique las leyes que protegen la propiedad en lugar de jalear los robos de Griñán.
Eulogio López
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