El Consejo de Ministros celebrado el pasado jueves autorizó la firma del convenio por el que se crea el consorcio de la Casa Sefarad-israelí, siguiendo la estela marcada por la Casa de América, Casa árabe y Casa África. Estas iniciativas pretenden marcar las prioridades de la acción exterior española. La Casa será financiada principalmente por el ministerio de Exteriores, pero colaborará también la Agencia española de Cooperación, la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Madrid, donde tendrá su sede.
El objetivo, según señala Exteriores es fomentar el desarrollo de las relaciones con la comunidad y organizaciones judías. O sea, se trata de recuperar una relación ya dañada después de que Moratinos abroncase en público al ex presidente de la comunidad judía en España y Blanco culpabilizase a Israel de los heridos y muertes en Líbano, tachándolos de deseados en lugar de víctimas no buscadas.