Con un poco de suerte, una subida impositiva a través de un aumento de tasas puede pasar inadvertida. Eso es lo que pensaba el vicepresidente Pedro Solbes, quien había aprovechado los Presupuestos Generales del Estado para provocar una fuerte subida de tasas como las de la Agencia Española de los Medicamentos o las de acreditación catastral. Estos impuestos por servicios permiten subidas de hasta el 400 por 100, porque no afectan a la generalidad, sino sólo a quien solicita tales servicios.
Pues bien, a pesar de que el Estado continúa con superávit (en la mañana del miércoles 22 se hacían públicas las cuentas del Estado), el lema sigue siendo : Si quieres bien gobernar, ni un duro debe escapar. Sólo que en el Senado, el PSOE está en una situación más débil que en el Congreso, y el PP ha aprovechado para colocar una veintena de enmiendas que han bloqueado la esperanza de Pedro Solbes de conseguir un dinerillo extra.