Joan Llopart se hizo multimillonario con Cofir, pero al parecer le va la marcha y no quiere dedicarse a vivir de las rentas. Por eso aceptó la oferta de La Caixa para reconvertir Zeta y lo está haciendo con los modales en él habituales: tan eficaces como brutales. Es verdad que Zeta había sedimentado capas y capas freáticas de directivos, soportables en una empresa puntera, pero no en otra que pierde dinero.
Ahora bien, los recortes de Llopart no afectan tan sólo a la clase directiva sino a los inmuebles. Así, piensa deshacerse de la tradicional sede de Zeta en Madrid, ubicada en la calle ODonnell, sede todas las revistas del grupo, y centrarse en Barcelona.
A partir de ahí, se tratará de vender El Periódico de Barcelona y algunos otros diarios regionales, que no van mal y el principal postor será Planeta, aunque José Manuel Lara no abre la boca... por el momento.
Por cierto, la tradicional revista pornográfica española Interviú, no atraviesa su mejor momento. Pierde cerca de medio millón de euros al año. La verdad es que la pornografía en España no vende nada.
