Sabéis, como todos los ciudadanos, que Zapatero es incapaz de gobernar y solo está en la Moncloa para adoctrinar. Esto debía ser suficiente para que el pueblo "salte" de sus cómodos sillones y proteste.
Habéis tenido el valor de ser vosotros, aunque desgraciadamente en número muy reducido, los que os habéis tomado la molestia de iniciar esta cruzada contra tan nefasta forma de gobernar; es una actitud que os honra y que todos los ciudadanos agradecemos y os felicitamos.
No podíamos seguir aguantando a unos dictadores que nos imponen una serie de normas y costumbres muy lejanas de las que el pueblo necesita y exige. No se puede reputar como derecho, lo que es un crimen; no se puede desprestigiar la consideración de matrimonio y familia, por la simple presión de un lobby; no se puede imponer en la enseñanza un adoctrinamiento en una ideología determinada; no se puede privar a los padres de la educación que crea más conveniente para sus hijos; no se puede dar toda clase de privilegios a una región, en detrimento de las demás; no se puede humillar al Estado de Derecho, negociando con asesinos; no se puede utilizar el dinero de todos los españoles, para comprar los votos en el Parlamento; no se puede…
Muy triste nuestra situación, el tremendo desprestigio internacional, la grave crisis económica, la inversión de funciones en Gobierno y oposición (la oposición que debía controlar y, en su caso, criticar la acción del Gobierno, es criticada por el Gobierno y obligada a defenderse), la mentira permanente de los gobernantes, el sometimiento de la justicia al Gobierno, el desprecio a las peticiones del pueblo, etc.
De nuevo mi felicitación por vuestra iniciativa. Habéis decidido, entre vuestras líneas de trabajo, una serie de ideas muy acertadas, aunque, permitidme, muy demagógicas y algunas sabéis bien que son imposibles de realizar; otras, muy peligrosas aunque quede muy bonita su expresión y alienten la pasión de la masa. Creo, humildemente, que os falta un poco de realismo.
Pero vuestra brillante y loable iniciativa la habéis enturbiado de manera notable. En primer lugar, cuando la protesta se hacía necesaria, habéis esperado hasta la proximidad de las elecciones para realizarla y, precisamente, cuando ya se sabía que los perversos que nos gobiernan, iban a ser desplazados; habéis transgredido la ley (algo que nadie puede hacer); habéis acampado en un lugar que no era el adecuado, pretendiendo significar que la protesta no era contra los causantes de nuestro mal, y habéis provocado un daño tremendo a unos pequeños empresarios y a toda la ciudad. Habéis actuado con una crudeza y violencia extrema, vociferando y acometiendo contra unos representantes del pueblo, elegidos por mayoría de ciudadanos y diciendo que no os representan a los "cuatro" que habíais organizado semejante altercado.
Si os saltáis la Ley y las más elementales normas democráticas, amigos míos, no tenéis mucho futuro, y ese aire fresco que llegué a suponer en vosotros, se ha enturbiado demasiado pronto. No sé por qué llego a pensar que, vuestras sanas intenciones, han sido conducidas por alguien sin escrúpulos que les ha impregnado una determinada intencionalidad política, del lado de siempre, para sacar un provecho de ese "río revuelto".
Ramón Usera