La vicepresidente primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, no ha dado muchas pistas sobre las posibles soluciones para los astilleros públicos Izar. Si estará claro que el Gobierno Zapatero no sabe a qué atenerse tras el varapalo de la Unión Europea a las ayudas públicas recibidas por Izar, que De la Vega ha hablado de establecer un diálogo para intentar solucionar la situación.
Lo cierto es que el comisario de la Competencia, el italiano Mario Monti, ha obligado al Gobierno español a devolver todas las ayudas concedidas a los astilleros públicos españoles, inmediatamente después de que se renovara el convenio colectivo con los sindicatos.
La dureza de la Comisión de Bruselas coincide con su blandenguería a la hora de examinar las ayudas públicas recibidas por empresas como las francesas EDF y France Telecom del Gobierno de París.
Sin embargo, Fernández de la Vega considera que el culpable es el anterior Gobierno Aznar, que no supo negociar adecuadamente estas ayudas ante la Unión Europea. Seguimos en la "herencia recibida".