La nueva Ley del Libro eleva a rango legal el precio único del libro. Con una excepción: el libro de texto. En lugar de los descuentos permitidos previstos en el borrador de la Ley, la ministra de cultura, carmen calvo, ha optado por el precio libre. ¿Por qué? Es lo que han pedido los libreros y editores, según señala Calvo, quien además informa que el vicepresidente económicos, Pedro Solbes, aseguró que la fórmula del precio libre abarataría el precio.
Evidente: la libertad de mercado siempre abarata los precios. Además, Calvo vende que de esta forma se favorece a las familias y a las bibliotecas, que se podrán hacer con los libros de texto a precio más ajustado. Eso sí, de manera temporal, porque el horizonte con el que trabaja el gobierno es con los libros de texto gratuitos, algo que ya se está aplicando en muchas CCAA de variado color político explica la ministra.