ONG anticastristas denuncian presiones del gobierno cubano en el cierre del Centro de Formación Cívica y Religiosa de Pinar del Río. En el último número de la revista del obispado cubano de Pinar del Rio, Vitral, su director, Dagoberto Valdés, advierte del inminente cierre de la publicación por falta de recursos económicos. Un eufemismo. Porque aunque no sobran los recursos económicos, la realidad es que el régimen castrista está ejerciendo una tremenda presión sobre el arzobispo de Pinar del Río, Mons. Jorge Enrique Serpa Pérez para el cierre de Vitral.
¿Por qué? Porque Vitral se ha convertido en la revista de pensamiento más crítica con el régimen. El anticastrismo –como el comunismo español y ETA- también se cultiva en las sacristías. Y hasta los ex comunistas conversos están empezando a leer Doctrina Social de la Iglesia y a tomar a Valdés como claro referente en la transición. Y por supuesto, el régimen no está por la labor de transiciones, sino de continuidades.
Para la Asociación Española Cuba en Transición, el centro constituía para muchos uno de los espacios "que más ha contribuido al fortalecimiento de la sociedad civil". Advierte además de que el cierre del centro provocará casi seguramente el cierre también de la revista. Por su parte, Mª Ángeles Altozano, responsable de comunicación de Solidaridad con Cuba insta a todos los españoles que gozamos de libertades a que se dirijan al Obispado de Pinar del Río "haciendo uso de la libertad de expresión que se les niega al pueblo cubano, le pidan que apoye a la revista Vitral y no permita su cierre", concluye.
