La Agencia del Medicamento sigue sin emitir el preceptivo informe que justifique el cambio de criterio La ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, advierte que no aceptará la objeción de conciencia de los farmacéuticos que se nieguen a dispensar la PDD. Pero la realidad es que muchos boticarios se sienten ahogados. No consideran que un mero cambio de la ficha por la Agencia del Medicamento tenga rigor suficiente. No consideran que la información facilitada por el Gobierno se atenga a los criterios de objetividad. Consideran que se está violando el derecho de la paciente a tener una información veraz. Y sobre todo, se niegan a violar su profesionalidad dispensando un producto que sus propios fabricantes reconocen como una incógnita para las menores. Eso, además de su componente abortivo negado por el folleto gubernamental. El Gobierno, apisonadora. Por eso ANDOC advierte de la indefensión de muchos farmacéuticos.