Sr. Director:

Con estas líneas quiero  felicitar a los médicos asturianos por negarse a abortar al indefenso niño de Avilés y al Colegio Asturiano de Médicos por su ejemplo de amor a la vida. Ante esta negativa  se plantea, al parecer, intentar realizar el aborto en Madrid.

Me avergüenza que la capital de España pudiera prestarse a ese "turismo de la muerte" y aceptar que alguien pueda traer a nuestra ciudad a esa infeliz e inocente madre para  matar aquí a su hijo, cuando la ciencia médica permite vivir a la madre y al niño.

Fernando Gortázar

fgortaza@gyc.es