La Comisión Europea ha rechazado este lunes ceder a España que examine la compra de Jazztel por Orange. Desplaza así a la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC), aunque, matiza, "seguirá cooperando estrechamente" con ella para evaluar el caso. Bruselas tiene de plazo hasta el 30 de abril para decidir si la autoriza y cómo (condiciones) la operación.
La Comisión apoya su decisión en que "habida cuenta de su amplia experiencia en la evaluación de asuntos en este sector, se encuentra mejor situada para analizar la operación y garantizar una aplicación coherente de las normas de control de concentraciones en el sector de las telecomunicaciones fijas y móviles en todo el espacio económico europeo".
No atiende así al requerimiento que le formuló la CNMC, que el 5 de noviembre pasado presentó una solicitud de remisión, ateniéndose al reglamento de concentraciones de la UE. Según esa norma, un Estado miembro puede pedir a la Comisión que le remita total o parcialmente un asunto para su evaluación, siempre que los efectos sobre la competencia se limiten al ámbito nacional o local.
Bruselas continuará ahora la investigación de la fusión Orange-Jazztel y tiene de plazo hasta el 30 de abril para decidir. El 4 de diciembre, Bruselas lanzó un examen en profundidad por considerar que la operación podría generar problemas de competencia y provocar un aumento de precios en nuestro país.
Andrés Velázquez