Un lector de Hispanidad nos acusaba de haber advertido que el partido Vox era tibio en materia de defensa de la vida. Para ello, nos reseñaba el ideario de la formación que lidera Santiago Abascal.   

Pues para muestra un botón: Abascal ha concedido una entrevista con esRadio, dirigida por el derechoso y liberalísimo Federico Jiménez Losantos, quien insistía, una y otra vez, en si Vox al menos, no aceptaría el aborto por violación. Lo otro sería caverna y todo el mundo sabe que Losantos es un liberal de mucho tomo y menos lomo.    

Y naturalmente, como pueden leer en el buen resumen de Infocatólica -por si no quieren ir la entrevista, toda entera- Abascal cede y dice sí al aborto tras la violación. Dejando a un lado que un embarazo por violación no alcanza ni al 1% del total de abortos, ¿qué culpa tiene el niño de que un desgraciado haya forzado a su madre?

Insisto: en esta tesitura, un católico no puede votar a Vox

Y eso que aún no ha tocado poder. Ya se sabe que, en cuanto llegan al poder, los políticos rebajan su ideario moral.

Otrosí, el amigo Abascal asegura que dependiendo de los casos -a este chico le encanta el probabilismo- una pareja de homosexuales puede adoptar niños, según en qué términos.

¿Cómo que Vox defiende la vida desde la concepción hasta la muerte natural? ¿Cómo que defiende los principios no negociables -vida familia, libertad de enseñanza, bien común-? Yo no lo veo.

Así que, en mi opinión, un católico no podría votar a Vox. ¿Al PP menos? Claro, pero es que no se trata del mal menor sino del bien posible Y no, el bien posible no es el mal menor.