José Antonio Álvarez, Ángel Ron y Emilio Saracho
“No tengo ninguna razón para pensar que la gestión de Ángel Ron y de Emilio Saracho en Banco Popular no fue honrada”, ha respondido este miércoles José Antonio Álvarez, durante la presentación de resultados trimestrales del Santander y a la misma hora en la que el expresidente Ron declaraba ante el juez de la Audiencia Nacional, José Luis Calama, por el caso Popular. “Pero es un asunto que está en los tribunales y prefiero no opinar sobre este asunto”, ha concluido.
La afirmación de Álvarez es importante, sobre todo si tenemos en cuenta la evolución de la postura del Santander acerca del caso Popular. Y es que, como adelantó Hispanidad, Rodrigo Echenique, en su día, intentó que la versión de Ron y de Saracho sobre la situación del banco fuera la misma. El objetivo era que el asunto terminara en un ‘caso fortuito’, sin culpables, casi producto del azar. Así, la responsabilidad quedaría diluida en la inmensidad del supervisor y los tres, Ron, Saracho y el Santander, quedarían libres de toda culpa.
Pero aquello no prosperó y el Santander cambió de estrategia: de considerarlo un ‘caso fortuito’, sin culpables, la entidad pasó a arremeter contra Ron. Hasta hoy.
Más cosas. Álvarez no se moja acerca de la situación económica: “No tenemos una visión distinta a la del consenso”, ha asegurado. Eso y nada es lo mismo.
Rabiosa actualidad: cobrar por los depósitos. Si está usted entre los “grandes clientes”, tiene motivos para estar preocupado. El Santander, que ya cobra por los depósitos institucionales, se puede plantear hacer lo mismo con “los depósitos no operativos de grandes clientes”, ha afirmado. Si es usted un particular, tranquilo. El Santander no contempla comenzar a cobrarle. Tampoco tiene pensado empezar a cobrar por servicios que actualmente ofrece de manera gratuita.
Frase que ha dejado a más de uno preocupado, sobre todo si la dice el número dos del Santander: “Siempre se pueden reducir costes”. El banco ha cerrado 1.200 oficinas en España durante 2019. El año que viene no se cerrarán tantas -“nos quedaríamos sin oficinas”-, pero sí se irá ajustando la red según los hábitos de los clientes.
Y no, tras hacerse con el Popular, el Santander no piensa en fusiones en España.