José Miguel García ha introducido a Euskaltel en el arriesgado mundo del low cost
Por fin traemos buenas noticias (o no). Euskaltel, si me permiten la expresión, está jugando bien sus cartas. El grupo ha publicado el martes por la tarde los resultados del tercer trimestre de 2020, en los que la facturación, ingresos totales, se ha incrementado un 1,8% respecto del mismo periodo de 2019, pasando de 171,1 millones de euros a 174,2 millones de euros. El beneficio neto antes de impuestos ha aumentado un 1,2% en igual comparativa, pasando de ser de 18 millones de euros en el tercer trimestre de 2019 a 20,2 millones de euros en el tercer trimestre de 2020. Además, tal y como refleja la nota de prensa, Euskaltel ha alcanzado un nuevo récord de clientes en el período. Esto pinta bien señores, aunque abundaremos más, no queremos dejar a nuestro querido lector con las ganas de conocer más sobre el grupo.
Estas cifras son sorprendentes aunque, quizás, no tanto. Euskaltel ha aprovechado la situación originada tras el Covid-19 por la que, entre el miedo y las multas por salir de casa más allá de lo establecido legalmente, los españoles pasan más tiempo que nunca conectados a internet y enganchados a sus móviles y a la televisión. Las cifras de la mayoría de las empresas del sector de telecomunicaciones siguen la misma senda que el grupo vasco. Euskaltel justifica este crecimiento principalmente debido a que la irrupción de la nueva marca del grupo, Virgin Telco, ha superado todas las expectativas previstas. Si se hiciera una campaña de marketing que resumiese el éxito de Euskaltel del trimestre sería: ¡Fibra óptica, móvil y TV para todos!
Analicemos ahora el Ebitda del grupo, a ver si el análisis de Euskaltel sigue sacándonos una sonrisa. Como es bien sabido, el Ebitda es el indicador más útil y simple para conocer la capacidad que tiene una compañía para generar recursos procedentes de su actividad de explotación. El Ebitda del grupo ha descendido en el tercer trimestre de 2020 en un 2,07% respecto al mismo trimestre del año anterior, siendo en el tercer trimestre de este año de 85 millones de euros. Un pequeño descenso con respecto al año anterior, nada relevante que mencionar. Sin embargo, la historia del Ebitda no ha acabado. El grupo, para dejarnos tranquilos, refleja que el Ebitda ex Virgin ha aumentado en un 1,1% en iguales términos comparativos, es decir, el Ebitda de su negocio tradicional ha crecido.
El flujo libre de caja del grupo ha descendido entre el tercer trimestre de 2019 y el tercer trimestre de 2020, pasando de 33,3 millones de euros a 24,4 millones de euros es decir, un descenso del 26,7% entre períodos. No nos echemos aún las manos a la cabeza. Este descenso se debe principalmente a que en el tercer trimestre de 2020 el grupo ha afrontado 47,7 millones de euros de inversiones, un 29,26% más que el mismo trimestre del año anterior. Normal, si gastas mucha pasta, tienes mucha menos que gastar, esto indica el fujo libre de caja, ni más ni menos.
No queremos extendernos más. Analicemos de manera breve la deuda de Euskaltel. La deuda neta del grupo ha descendido en 54,8 millones de euros en el tercer trimestre de 2020 respecto al mismo trimestre del año anterior, un 3,59%, pasando de ser de 1.522,8 millones de euros a 1.468 millones de euros, cantidad nada despreciable en los tiempos que corren.
Como siempre, acabaremos con una breve conclusión sobre los estados financieros de Euskaltel del tercer trimestre de 2020. Euskaltel, bien jugado. El que aprovecha las oportunidades que la vida le presenta no es un genio pero, al menos, no es un tonto. Euskaltel no ha inventado nada, simplemente está actuando con sentido común tras la situación de la pandemia Covid-19, ojalá hiciese lo mismo nuestro ‘querido’ Gobierno.
Sea como fuere, al mercado no le han gustado estos resultados y la cotización de Euskaltel cae más de un 3,7% al comienzo de la sesión de este miércoles.