• Imaz ve luz al final del túnel, con el crudo a 50 dólares, y se vuelve generoso.
  • Al final, estás mandando a casa, con el 80% del salario, a los 57 años de edad.
  • Y podrán hacer compatible esta prejubilación con cualquier otro trabajo.
Los sindicatos han valorado las condiciones acordadas con Repsol como "una de las mejores hasta ahora" en procesos de este tipo. Y no es para menos. Resumiendo, estamos hablando de salidas voluntarias a partir de los 57 años de edad, con el 82% del salario neto hasta la edad de jubilación, y con las ventajas sociales -cantidad equivalente a la aportación empresarial al plan de pensiones y el importe del seguro sanitario- incluidas. Sin duda, se trata de unas condiciones excepcionales que empujarán a más de uno a abandonar la compañía. De hecho, los sindicatos estiman que el 90% de las bajas en nuestro país serán, efectivamente, voluntarias. Piensen, además, que los que acepten podrán compatibilizar estas condiciones con cualquier otro trabajo. Y es que, después de unos meses muy complicados, el consejero delegado, Josu Jon Imaz, ha visto la luz al final del túnel, con el barril de Brent en el entorno de los 50 dólares. Ahora, la prioridad de la compañía es lograr un acuerdo con los trabajadores de Repsol Butano, que están negociando por separado. Lo previsible, en cualquier caso, es que las condiciones sean muy parecidas a las logradas por el grueso de la plantilla. En total, el ERE presentado por Repsol en octubre contempla la salida, entre 2016 y 2018, de unos 1.500 empleados en todo el mundo -la plantilla del grupo es de 25.000 trabajadores-, de los que 750 serían en España. El expediente de regulación de empleo se enmarca dentro el Plan Estratégico 2015-2020, que incluye un recorte de la inversión y un plan de desinversiones. Todo motivado por la fuerte caída del precio del petróleo. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com