- A lo máximo que aspira nuestro país es a la Vicepresidencia del BCE.
- Y Elke König ratifica la debilidad de nuestro país durante su comparecencia en sede parlamentaria.
- Italia frente a España o los dos modelos de salvamento bancario.
La economía española crece más que la media europea y más que Alemania, Francia e Italia. Nuestro país se ha convertido en una de las locomotoras económicas del Viejo Continente, un hecho que debería trasladarse al plano institucional o, si lo prefieren, político. Sin embargo, ocurre todo lo contrario: España pinta cada vez menos en Europa y el máximo responsable es
Mariano Rajoy Brey.
Los hechos están ahí. Además del fracaso para acoger sedes europeas tras el brexit, hablamos, por ejemplo,
de la candidatura fallida de Luis de Guindos para presidir el Eurogrupo. Algo que ahora se intenta tapar anunciando que España ocupará un puesto relevante en el BCE. Pero no nos engañemos: el único cargo importante es el que ostenta el italiano
Mario Draghi. Al menos, es el único que compensaría el 'no' del Eurogrupo.
Pero a lo máximo a lo aspira España es a la Vicepresidencia del BCE. Atención, pregunta: ¿Cómo se llama el actual número dos del Banco Central Europeo? No se preocupe si no sabe que es el portugués
Vitor Manuel Ribeiro Constâncio. Es tan poco conocido como escasa su relevancia.
Y por si alguien tenía alguna duda,
Elke König se encargó el lunes de disiparla. En sede parlamentaria, la presidenta de la JUR se pitorreó de los españoles al no contestar a casi ninguna de las cuestiones que le plantearon los portavoces. ¿
Se imaginan a König mostrando la misma actitud en el Bundestag o en el parlamento italiano?
Precisamente, el ejemplo italiano es el que mejor muestra la debilidad española. ¿Por qué la JUR ha intervenido el Popular y no Banco Popolare di Vicenza o Veneto Banca? Los italianos nunca dejaron que Europa rescatara a sus entidades. ¿
Por qué no rescatarlas yo mismo y así, además, me ahorro los intereses del préstamo europeo? Porque
Bruselas no regala el dinero del rescate. Hay que devolverlo y con intereses.
Rajoy ha logrado minimizar a España en Europa y Bruselas se aprovecha.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com