Empecemos por el final. Pedro Sánchez le está echando un pulso a Angela Merkel: no pactará con el PP.

Recuerden lo anunciado en Hispanidad ya a finales de agosto un mes atrás:  Europa no se fía de Sánchez pero tampoco de su poder parlamentario. No era una pega económica para recibir el dinero del fondo de recuperación (144.000 millones de euros, 72.000 en subvenciones), que también, sino política. Europa, con Alemania a la cabeza piensa que sus aportaciones pueden convertirse en un pozo sin fondo dada la falta de apoyos parlamentarios de Sánchez, al tiempo que se muestra preocupada por la presencia de los comunistas de Podemos, expertos en dilapidar el dinero público.

Por tanto, Bruselas insiste: Sánchez debe contar con 200 diputados si quiere recibir el dinero europeo, pero Sánchez no está por la labor: seguirá con los podemitas y apoyado por los separatistas hasta el final. Considera que el dinero europeo llegará, de un modo u otro. De hecho, pronto lo veremos dado que el Consejo Europeo comienza el jueves 15, día en que España se comprometió a presentar proyectos concretos.

Alemania intenta reconducir el debate: obliguemos a Moncloa a ejecutar las grandes reformas pendientes -sobre todo pensiones- a cambio de dinero

Recordemos los estudios que pululan por Alemania asegurando que si el PIB español cae el doble que Alemania, el peso de España hundirá toda la economía Europea, Pues bien, el informe ultimo del FMI (publicado el martes 13) dice exactamente eso: que el PIB español caerá un 12,8% frente al 6% de Alemania.

Eso sí, la prejubilada Merkel intenta reconducir el debate. No le obliguemos a que pacte con el PP pero obliguémosle a ejecutar las grandes reformas pendientes -sobre todo pensiones-, a cambio del dinero del plan de recuperación. En ello estamos: El Consejo europeo comienza el jueves 15.