La economía española continúa anestesiada, por lo que las variaciones mensuales de la morosidad bancaria no serán muy bruscas. Lo importante es la tendencia y 2021 ha comenzado con un alza de cuatro décimas, del 4,50% de diciembre al 4,54% de enero, según datos provisionales publicados este lunes por el Banco de España.

Ni siquiera las medidas de apoyo -créditos ICO y moratorias, principalmente- han podido contener la morosidad (total de créditos dividido entre los dudosos) que ha aumentado por el descenso del total de créditos concedidos, que disminuyeron cerca del 1%, hasta 1,21 billones de euros. Los dudosos cayeron un 0,17%, respecto a diciembre, hasta 55.066 millones de euros.

Los datos todavía no son preocupantes. Conviene recordar que un año antes -enero 2020-, la morosidad estaba en el 4,85%. Lo preocupante es la tendencia. De hecho, el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos ya alertó en febrero de un aumento importante de la morosidad.