Se acaba de presentar en el Museo Reina Sofía, un museo estatal, es decir, que recibe dinero público, ‘La bondadosa crueldad’, una retrospectiva del artista argentino León Ferrari (1920-2013), con motivo del centenario de su nacimiento.

En la muestra se exhibe una obra, titulada 'La civilización Occidental y Cristiana' (1965), que consiste en un Cristo crucificado sobre un avión militar estadounidense que, al parecer, denuncia la naturalización de la violencia por parte de la sociedad.

El cardenal Bergoglio, actual Papa Francisco, calificó esta obra como «blasfemia», según recoge La Razón.

Según el director del Museo Reina Sofía, Manuel Borja-Villel, la muestra se encaja en una «lógica interna de crítica a las desigualdades del mundo». Mientras que para el comisario Javier del Olmo es simplemente «amor», recoge el mismo medio.

Pero no es la primera vez que el Museo Reina Sofía ofende los sentimientos religiosos de los cristianos. En 2014, la exposición 'Un saber útil' incluía obras vejatorias hacia la Iglesia Católica.

Teniendo en cuenta que el Museo Reina Sofía es estatal, o sea, financiado con dinero de todos los españoles, no estaría de más que mostrase un poco más de respeto por las creencias de los españoles, que mayoritariamente se declaran católicos.