• Y es que, además, no lo necesita.
  • La marcha de la entidad es buena. Incluso tiene grupo industrial.
  • Pero la EBA no ceja en su empeño de tocar las narices a los bancos españoles.
  • Por ejemplo, ausculta a Criteria, que no es un banco, pero con el Deutsche Bank no se atreve.
Ibercaja Banco (87,5% propiedad de la Fundación bancaria Ibercaja) no saldrá a bolsa de momento. Las razones son poderosas: no quiere y no lo necesita, y menos aún a los precios a los que cotizan actualmente las entidades de crédito. Lo cierto es que la entidad que preside Amado Franco (en la imagen) marcha bien, en el contexto actual de tipos en mínimos -este jueves, el BCE los ha rebajado hasta el 0%-. Ibercaja puede presumir, incluso, de tener un grupo industrial. En definitiva, de las entidades medianas que todavía no cotizan en bolsa -Unicaja, Kutxabank y BMN-, Ibercaja es, junto a la vasca, la que podría hacerlo, pero no quiere. Todo lo contrario le ocurre a BMN: quiere pero no puede. Y Unicaja está, por así decirlo, entre los dos extremos. Ahora bien, aunque Ibercaja avanza con paso firme y, lo que es más significativo, mantiene la filosofía de las antiguas cajas de ahorros, debe enfrentarse a las inspecciones de la Autoridad Bancaria Europea (EBA). Y dirán: si va bien, no tiene de qué preocuparse. Efectivamente, eso es lo que debería ocurrir pero, lamentablemente, no es así. Y es que la EBA está empeñada en poner trabas a los bancos españoles, Unicaja incluido a pesar de ser uno de los  más sólidos de los bancos medianos. Un ejemplo: mientras la EBA ausculta con exagerara pulcritud a Criteria, que ni siquiera es un banco, hace la vista gorda con el Deutsche Bank. Sencillamente, no se atreve con el primer banco alemán que, todo hay que decirlo, está atravesando su peor momento y amenaza con dar un buen susto cualquier día de estos. Por no hablar de las cajas de ahorros regionales alemanas, ese gran desconocido que la EBA pasa por alto, no vaya a ser que se descubra su verdadera situación financiera y nos tengamos que enfrentar al Gobierno alemán. En resumen, el Deutsche Bank no se toca, las cajas germanas no se tocan, los bancos italianos no se tocan y los franceses tampoco. Los españoles, sin embargo… Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com