El Deutsche Bank de Christian Sewing apuesta claramente por la banca de inversión frente a la banca doméstica
Deutsche Bank, el primer banco alemán, ha ganado 692 millones de euros netos hasta septiembre, más de la mitad menos (el 58,4%, en concreto) que en año anterior, con todos los registras a la baja, aunque prevé cerrar el año en beneficios, los primeros desde la reestructuración emprendida por la entidad, primero con John Cryan, fulminado en abril y sustituido por Christian Sewing (en la imagen).
Esa posibilidad, el beneficio, es lo único positivo en las cuentas de Deutsche Bank muy afectado todavía por el plan de ajuste laboral en marcha. En lo que lleva de año ha despedido a 2.800 empleados y el recorte seguirá hasta dejar la plantilla en menos de 90.000 personas en 2019 (ahora, en 94.717).
Christian Sewing, el CEO, dice que volverá a ser rentable... pero recorta el beneficio un 60%
Todo para reducir costes (en 23.000 millones, este año y en 2019), el objetivo de Sewing para hacer rentable la entidad, sin que de momento le acompañe lo demás. De hecho, el negocio se resiente, como muestra la caída de los ingresos, del 4,8% (19.741 millones), aunque el margen de intereses mejora un 1% (17.800 millones) y las provisiones descienden un 31% (a 273 millones).
Normal que, con estas cuentas, Deutsche Bank se haya convertido en una preocupación de Estado para la canciller alemana, Angela Merkel, sobre todo después de que la Reserva Federal americana lo calificara de “banco problemático”. Pero la Fed fue más suave que el FMI, dos años antes, cuando dijo que era “el banco más peligroso del mundo”.
El plan de reestructuración para reducir costes en 23.000 millones anuales está a mitad de camino
Los resultados del tercer trimestre muestran una caída del beneficio neto del 67,4% (211 millones) y un recorte de los ingresos del 9% (6.175 millones). Reduce sobre todo los del área de banca corporativa y de inversión (-13%), con caídas del 14,5% por mediación en renta fija (1.320 millones) y del 15% en renta variable (466 millones). Los ingresos en banca minorista, sin embargo, caen pero menos, un 3% (2.518 millones), por los tipos de interés en mínimos.