• El consejero delegado desde 2012 es también, desde ahora, el presidente.
  • Sustituye a Véronique Weill, que sorprendió a todos abandonando la compañía en enero, solo dos meses después de su nombramiento.
  • A pesar de la acumulación de cargos, la compañía asegura que cumple todas las guías de buen gobierno del sector.
  • Por cierto, Rignault no cobrará más por ser presidente del Consejo de Administración.
  • Axa España cuenta con cerca de 3 millones de clientes y un volumen de negocio total de 2.362 millones de euros en 2016.
El pasado mes de enero, Véronique Weill decidió abandonar la Presidencia de Axa España, cargo no ejecutivo que ocupaba desde noviembre de 2016. Sin duda, fue una vacante inesperada que la compañía ha tardado dos meses en cubrir. Y es que Weill formaba parte del Comité Ejecutivo de la multinacional desde diciembre de 2012. El elegido para sustituir a Weill ha sido Jean-Paul Rignault (en la imagen), consejero delegado de Axa España desde diciembre de 2012. De esta manera, Rignault acumula, desde este lunes, todo el poder en la filial española. Pero tranquilos, porque la compañía ha asegurado a Hispanidad que, a pesar de esto, cumple todas las guías de buen gobierno del sector asegurador. Por cierto, Rignault no cobrará más por ser también presidente del Consejo de Administración. Su remuneración seguirá siendo únicamente la de consejero delegado. Ciertamente, Axa España no es una de las grandes filiales del grupo francés, pero sí es importante. De hecho, desde la reestructuración de la cúpula llevada a cabo por la multinacional en verano de 2016, el representante de Axa España reporta directamente a París. Estamos hablando de una filial con cerca de 3 millones de clientes y un volumen de negocio total, en 2016, de 2.362 millones de euros. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com