La verdad es que los chinos se aprovechan de las bondades de Occidente y los norteamericanos se han cabreado.

La actitud china, además, se han vuelto prepotente: encima de que venimos a invertir no nos dan facilidades…

Sencillamente, Estaos Unidos se ha cansado de que China se haya convertido en la segunda potencia económica mundial gracias a un ‘dumping’ social lamentable: sus trabajadores son explotados. Y también, gracias al procedimiento de copiar y luego competir a precios reducidos y al modelo “un país dos sistemas” que, en el caso chino, representa algo tan repugnante como: sistema económico capitalista y sistema político comunista.

La Casa Blanca no ha hecho otra cosa que pararle los pies al abusón chino. Sólo que en Europa no nos hemos enterado.