Más de 600 inmigrantes negros han entrado violentamente en la ciudad española de Ceuta desde Marruecos.

Digo negros porque no hay nada malo en ser negro. No son subsaharianos, son de raza negra, africanos desesperados que han atravesado el Sáhara para entrar en Ceuta, es decir, en España, es decir, en Europa.

¿Seguro que eran tan malas las concertinas? 

Nunca se había dado una entrada tan violenta, donde los negros han lanzado cal viva contra la policía española. Y han empleado todo tipo de armas: radiales, sprays industriales convertidos en lanzallamas y hasta bolas de heces para lanzarlas contra los guardias civiles.

Mientras la corrupta policía marroquí, y esa especie cuerpo parapolicial conocidos como majanis o mejanis, miraban hacia otro lado. Total, los heridos eran asqueroso negros o repugnantes españoles.

Después de esto, ¿las concertinas eran una mala idea? ¿Una crueldad? Son elementos disuasorios pero la izquierda española es cainita y adicta a la demagogia, y claro…

​La única opción sigue siendo militarizar Ceuta y Melilla y abrir un aeropuerto en la primera lo que, por cierto, daría más vida a la ciudad

la única opción sigue siendo militarizar Ceuta y Melilla y abrir un aeropuerto en la primera. Y ambas cosas darían más vida a la ciudad.

Y ya de paso, acabar con el peligroso gueto de El Príncipe. O so, hacer que melillenses y cutíes sigan siendo ciudadanos de segunda división.

Y acabar con el peligroso gueto de El Príncipe

Podrán seguir engañándonos, pero lo cierto es que el Rey de Marruecos, Mohamed VI (en la imagen) quien permite que esto ocurra, quien manipula a los pobres negros desesperados cada vez más violentos, quien ama el barrio de El Príncipe un nido yihadista dentro de España… y quien pretende que España se rinda y les ceda Ceuta y Melilla.

Y con la inmigración, lo de siempre: donde hay que ayudas es en el país de origen del inmigrante… para que no se va obligado a emigrar.