Parece que Zalando tardará en recuperarse del batacazo bursátil sufrido el miércoles 3 (la cotización cayó un 9,47%) tras anunciar unas pérdidas de 8,4 millones de euros en el tercer trimestre, las cuales reflejan que le ha pasado factura la vuelta a la normalidad. Este jueves su cotización ha subido más de un 4%, pero no ha podido recuperar el terreno perdido el día anterior.

La plataforma alemana de moda online, que es el líder en Europa, ha achacado los números rojos a “la relajación de la mayoría de las restricciones en toda Europa, la reapertura de las tiendas físicas y el aumento constante de la movilidad de los consumidores”, así como a las fuertes promociones para afrontar la vuelta de la competencia física. Dado que se han normalizado las tasas de crecimiento, pues las compras online se dispararon durante el Covid, Zalando también ha registrado un beneficio operativo (Ebit) negativo de -4,6 millones y ha visto desplomarse su beneficio bruto de explotación (Ebitda) un 60% en el tercer trimestre.

Estiman que los ingresos crezcan en el conjunto del año un 26-31%, hasta los 10.100-10.500 millones, meta que parece alcanzable si se tiene en cuenta la cifra acumulada en los nueve primeros meses (7.254 millones, un 34% más)

Por su parte, tanto los ingresos como los clientes han continuado creciendo. En concreto, los ingresos han subido un 23,4%, a 2.300 millones, y la base de clientes activos se ha incrementado un 30%, a 46,3 millones de personas. Además, ha logrado un nuevo récord en la media de pedidos por cliente activo, que ha alcanzado los 5,1 pedidos en los últimos 12 meses, y el volumen bruto de la mercancía (GMV) -es decir, el volumen de transacciones- ha crecido un 25,3%, a 3.100 millones.

Zalando muestra cierta preocupación, como el resto del mundo, por el aumento de los costes logísticos y la crisis de suministro de productos procedentes de Asia, aunque su director financiero, David Schröeder, considera que está preparada: tiene stock suficiente para los próximos meses, con unos inventarios un 41% superiores a los de hace un año. Eso sí, no descarta que algunas categorías puedan sufrir en los próximos meses, sobre todo de cara al abastecimiento de la campaña de primavera-verano 2022.

La plataforma alemana de moda online, a pesar de la creciente inflación y de las incertidumbres en la cadena de suministro, confía en lograr sus previsiones y “ahora estamos deseando sorprender a nuestros clientes y apoyar a nuestros socios durante la cyber week (que incluye el Black Friday y el Cyber Monday) y la próxima temporada festiva (la navideña)”, ha señalado Schröeder. En concreto, estiman que los ingresos crezcan en el conjunto del año un 26-31%, hasta los 10.100-10.500 millones, meta que parece alcanzable si se tiene en cuenta la cifra que ha acumulado en los nueve primeros meses (7.254 millones, un 34% más), y prevén que el GMV ascienda un 31-36%, a 14.000-14.600 millones.