Están hartos. El Comité Nacional de Transporte por Carretera ha emitido un durísima nota contra el Gobierno Sánchez.

Todo el comunicado podría resumirse con una de sus frases: de nada sirve que las grandes superficies abran sus puertas si los transportistas no hacen llegar su mercancía. 

Nada más cierto. Y el asunto empieza a resultar urgente porque el fantasma de una crisis de abastecimiento no es imposible y porque el sector del transporte español empieza a cansarse de un combustible cada vez más caro y de unos costes crecientes. Ahora mucho más, desde que tenemos un gobierno ecologista, para el cual el transporte es un enemigo declarado del planeta y aplica sus recetas verdes, que no son otra cosa que nuevas cargas económicas para el camiosnero.

Y por cierto, ¿puede darse en España una situación como la británica, con problemas de abastecimiento, tanto industrial como doméstico, por falta de transportistas? Sí, es perfectamente posible. 

Este es el ambiente general del país. Para muestra un botón. Un ganadero de Galicia habla de la situación de su sector.