Paz social en Telefónica. Empresa y sindicatos han firmado este miércoles el ERE y el nuevo convenio, que incluye la reducción gradual de la semana laboral hasta las 36 horas, extremo que no se cumplirá hasta el tercer año de aplicación del convenio, en 2026.

Vamos con el ERE, que más que un expediente de regulación de empleo son prejubilaciones, justo lo que la compañía quería evitar. Hasta el líder de CCOO, Unai Sordo, lo reconoció este miércoles en una entrevista en TVE. Y es que Telefónica ha cedido en lo que consideraba más importante, la única línea roja que no debía traspasar: el carácter forzoso del ajuste.

Al final, el número de afectados se ha reducido considerablemente: 3.421 frente a las 5.100 iniciales, y tendrán condiciones propias de un plan de salidas, no de un ERE. Así, para los nacidos en 1968, la empresa les ofrece una renta del 68% del salario regulador hasta los 63 años, que pasa a ser del 38% hasta los 65 años.

Para los nacidos entre 1967 y 1964, la oferta de Telefónica es del 62% del salario regulador hasta los 63 años, que pasa ser del 34% hasta los 65. Además, les ofrece una prima de voluntariedad de 10.000 euros, la misma que cobrarán los nacidos en 1963 o antes que se adhieran al ERE. En este caso, la renta es del 52% del salario regulador hasta los 63 y del 34% hasta los 65.

¿Acaso no se trata de un plan de salidas incentivadas más que de un ERE? De hecho, las condiciones son prácticamente las mismas a las del anterior plan de salidas. Sea como fuere, el periodo de adscripción durará un mes: desde el 9 de enero hasta el 8 de febrero y las salidas comenzarán a finales de ese mismo mes.