Esta vez el proxy advisor -es decir, asesor de voto para los inversores, sobre todo, los accionistas institucionales, o sea, los fondos de inversión- Institutional Shareholder Services (ISS) quiere injerir en IAG. Ahora pide, bueno, más bien recomienda, que se vote en contra del nuevo incentivo a largo plazo que se propone para el CEO del holding aéreo, Luis Gallego.

Tras molestar otros años en la ‘megaembotelladora’ Coca-Cola Europacific Partners (CCEP) y en Iberdrola, ahora ISS lo intenta en el holding aéreo, cuya Junta de Accionistas se celebrará el próximo 19 de junio en Madrid. Esta vez recomienda votar en contra de la propuesta número 9 (la aprobación de la política de remuneraciones de los consejeros), que incluye el nuevo incentivo a largo plazo del CEO que incluye: el actual plan restringido de acciones (RSP) hasta un 150% del salario baso y un plan de incentivos de desarrollo extraordinario vinculado a varios requisitos.

Eso sí, otro proxy, Glass Lewis, recomienda votar a favor de las 16 propuestas de acuerdo (ver documento adjunto de la convocatoria), incluida la novena.

Hasta ahora, los proxy advisors solían estudiar las propuestas de acuerdo que las compañías presentan a sus accionistas para hacerles la tarea más fácil a los fondos a la hora de votar, pero hasta ahora solían hacerlo con cosas más generales, no con aspectos tan concretos (como el caso del citado incentivo a largo plazo). Si quieren intervenir en las decisiones, que compren acciones… y se conviertan en accionistas. En IAG, hasta ahora el primer accionista es la aerolínea catarí Qatar Airways (24,995%), seguida de varios fondos de inversión: Capital Research (5,091%), BlackRock (3,949%) y Europacific Growth (3,036%).

Entre las propuestas de acuerdo, la séptima incluye nueve reelecciones de consejeros (incluidos la del presidente, Javier Ferrán, y el CEO, Luis Gallego) y dos nombramientos (Simone Menne y Päivi Rekonen), pues ya no se reelegirá al exbanquero Emilio Saracho como consejero. Eso ganan.