
OHLA acapara titulares día tras día. Su situación agónica la vamos sabiendo con cuentagota. Y con este panorama, el Grupo necesita buena imagen tras varias jornadas siendo castigada en el parqué. Así ha definido su hoja de ruta para el periodo 2025-2029 con un nuevo plan estratégico con el que prevé superar los 5.000 millones de euros en ventas en 2029, lo que representa un crecimiento cercano al 20% respecto a 2024.
Esta evolución vendrá acompañada de una mejora "sustancial" de la rentabilidad, con un resultado bruto de explotación (Ebitda) que prevé que supere los 300 millones de euros, cifra equivalente al 6% sobre ventas, impulsado por un cambio en el 'mix' de los ingresos del grupo.
OHLA se une a la moda de las concesiones, como Sacyr, y su plan pasa por impulsar el negocio concensional, que esperan que se convierta en uno de sus principales generadores del resultado financiero. Además, en otro alarde de originalidad, pone los ojos en el mercado americano: el crecimiento se verá respaldado "por la sólida posición del grupo en Estados Unidos".
Para cumplir con los objetivos OHLA ha diseñado lo que denomina 'Plan de mejora de la eficiencia', basado en la transformación organizativa y con el que estima que reducirá costes en aproximadamente 40 millones de euros. ¿Adivinan? Se simplicará la estructura organizativa de algunas divisiones, como la de Construcción. Una vez más, mismo esquema, constructoras mal gestionadas que acaban siendo una concesionaria con algunas construcciones.
Paralelamente, OHLA "llevará a cabo una racionalización de la división de Servicios, incluyendo la fusión de delegaciones en España y la consolidación de funciones de soporte". Para entendernos, anuncia lo que en Hispanidad nos gusta denominar jibarización. El Grupo ha pasado de constructora a concesionaria que tiene construcciones, que cada vez son menos, y con este anuncio, reduciendo también el área de Servicios se confirma que lo que tienen los hermanos Amodio en la cabeza son concesiones. Pero el problema de vender activos, reducir tamaño y centrarse sólo en un sólo tipo de negocio, es que los activos sólo se pueden vender una vez y supone, además, reducir el perímetro de la compañía. Este es el escenario que vive actualmente OHLA.
El plan se presenta el mismo día que la empresa ha confirmado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) lo que contamos ayer mismo en Hispanidad. El empresario José Elías sólo acudirá a la ampliación de capital de 50 millones si se cumplen ciertas condiciones.
Elías ha exigido a la dirección de OHLA que renueve su consejo de administración, incluyendo el nombramiento de un nuevo consejero delegado (CEO). En el comunicado se detallan las exigencias del dueño de Audax y La Sirena, incluyendo la designación de un nuevo consejo de administración compuesto por cinco consejeros dominicales, cuatro consejeros independientes y un nuevo consejero delegado, así como el nombramiento de un nuevo secretario del consejo de administración.
La compañía ha precisado que estas peticiones "dependen de su juicio personal" (de Elías), añadiendo que el empresario no detalla la identidad de los nombramientos exigidos.
Al mismo tiempo que muestra su oposición a las peticiones de Elías de renovación del secretario y del CEO, asegurando que las personas que actualmente desempeñan esos cargos cuentan "con el respaldo unánime del consejo de administración y se le considera (al CEO) la persona idónea y que mejor sirve el interés social de la sociedad".