El gigante tecnológico estadounidense Microsoft ha anunciado el despido de 6.000 empleados de su división de Xbox --su consola de videojuegos--, lo que supone el 3% de su actual plantilla, que cuenta con unos 228.000 empleados a nivel mundial.

Este recorte de trabajadores se suma al que la empresa acometió en 2023, cuando echó a unos 10.000 trabajadores.

Según la empresa, los cambios buscan situar mejor a la compañía en el mercado y emprender una reorganizaron interna. 

Pero también ha trascendido que su división de Xbox ha sufrido presiones por parte de los altos ejecutivos de la empresa para que incremente sus márgenes de beneficio, después de la adquisición en 2023 de Activision Blizzard por una cuantía de 69.000 millones de dólares (59.367 millones de euros).