La estadística Tinsa publica los datos del precio medio de la vivienda nueva y usada correspondientes al mes de abril: se registra un ligero estancamiento, por cuarto mes consecutivo, con un tímido aumento del 0,1% entre marzo y abril, por lo que: "El mercado residencial consolida la tendencia de estabilización de los precios iniciada a mediados de 2022, aunque con excepciones en las zonas con mayor actividad turística". Estancamiento que ya avisó el organismo cuando publicó los datos correspondientes al primer trimestre del año. 

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La variación respecto a abril de 2023 se sitúa en el 3,2%: "‘Costa mediterránea’ e ‘Islas’ se desmarcan con una dinámica alcista de precios, que en el último mes se ha concretado en un aumento del 1 % respecto al mes anterior", advierte la estadística Tinsa IMIE General y Grandes Mercados publicada hoy.

Y es que en términos interanuales, la mayoría de los grupos analizados presentan pequeños repuntes,entre 2% y 9%. El impulso de los grupos ‘Capitales y Grandes Ciudades’ (2,1% interanual) y ‘Áreas Metropolitanas’ (3,1%) y Municipios de interior” (2,0%) es modesto y acorde con la tendencia a la estabilización que muestran estas series de precios desde la segunda mitad de 2022, mientras que “Territorio Insular” (+9,0%) y “Costa Mediterránea” (+6,8%) se vuelven a acelerar.

Cristina Arias, directora del Servicio de Estudios de Tinsa, asegura que: "En abril los precios residenciales han vuelto a confirmar el patrón de estabilización en polos de empleo, áreas metropolitanas y municipios de interior, mientras que las zonas con mayor componente turístico han reflejado un nuevo impulso".

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Si bien la desaceleración o estancamiento se hace patente mes a mes, desde Tinsa aseguran que se sostiene la solvencia, destacando una serie de factores que están favorecido el mantenimiento de la solvencia de la demanda. “En los primeros cuatro meses del año la inflación subyacente ha continuado moderándose y el empleo ha seguido resistiendo. Todo ello contribuye a la recuperación del poder adquisitivo de los hogares, que sostienen su solvencia, y mejora la confianza del consumidor”, apunta Arias. Afirmación que va en consonancia con las previsiones de los portales inmobiliarios

Debemos recordar que el pasado mes, según analizaba Tinsa el último trimestre de 2023, "Las compraventas en 2023 se han financiado en su mayoría con fondos propios, con un componente relevante de compraventas de extranjeros y un mantenimiento de la proporción de adquisiciones por parte de entidades jurídicas". Lo que confirmaba hace unos días el Instituto Nacional de Estadística al publicar los datos de compraventas y de firma de hipotecas: la colonización extranjera del mercado es un hecho, y el mercado nacional muestra síntomas de estar entrando en una nueva crisis. 

Algo que desde Tinsa vuelven a resaltar, Arias destaca que la estabilización de los precios en los polos de empleo y las áreas metropolitanas refleja la dificultad de acceso a la vivienda por parte de la demanda local. “Aun así, la concentración de la demanda en estas zonas combinada con la escasez de oferta a corto plazo contribuye a sostener los precios. Por su parte, las zonas turísticas acusan el tensionamiento de los precios que añaden la demanda de inversión y los compradores de segunda residencia”, explica.